26/03/2022.- El Premio a la Igualdad "Alicia Salcedo" no solo se ha consagrado este viernes al celebrar ya su quinta edición, sino que además ha adquirido dimensión internacional con la concesión de este reconocimiento a Patricia Viseur Sellers, abogada experta en derecho internacional de los derechos humanos, derecho penal internacional, derecho humanitario y las intersecciones con el género. 

Ante un Salón de Actos abierto al público en general y con gran afluencia de representantes de varias instituciones políticas, sociales y profesionales, Patricia Viseur Sellers recibió el galardón en el transcurso de un acto presidido por una frase que permaneció inmóvil en el pantallón: 

"Hay un arma secreta en todo conflicto armado que se reproduce sistemáticamente bajo la mirada anodina del planeta, cuya crueldad debiera escandalizar la moral del mundo: es la violencia sexual extrema que se inflige sobre las mujeres. Una batalla que se perpetra en el cuerpo de ellas, que son el botín de una guerra decidida, financiada y ejecutada por hombres."

Victoria Ortega, presidenta del Consejo General de la Abogacía, miembro del jurado del Premio, abrió el acto teniendo unas palabras de apoyo "de toda la Abogacía a la sociedad ucraniana" por un conflicto donde "el gran perdedor siempre es el ser humano" .

Posteriormente, cedió la palabra al secretario de la Junta de Gobierno, Pelayo Fernández-Mijares, para dar lectura al fallo del jurado del galardón, de fecha 14 de febrero de este año en curso.

La siguiente en intervenir fue la diputada y presidenta de la Comisión de Igualdad, María Martín, quien confesó, emocionada,, sentir "un gran honor" por contar con la presencia de Patricia Viseur Sellers, de quien alabó la enorme trayectoria de logros en pro de un mundo más igualitario entre mujeres y hombres y, en particular, por abrir el camino en perseguir los delitos de violencia sexual contra las mujeres en conflictos armados.

Ignacio Bernardo, responsable de Relaciones Institucionales de Amnistía Internacional de Asturias, también miembro del jurado, fue el encargado de exponer el laudatio de la galardonada.

La sorpresa para los presentes llegó cuando la presidenta del Consejo dio paso al Coro del ICA Oviedo, quien interpretó dos temas desde los laterales del patio de butacas, con la directora, Silvia Martínez, pidiendo disculpas a quienes estaban en el estrado "por tener que darles la espalda, pero estuvimos ensayando y no encontramos otra solución mejor".

El escultor de la obra que este año serviría como premio, Federico Granell, fue llamado a explicar su escultura, sintiéndose muy agradecido con el Colegio por la oportunidad de mostrar su arte y, en concreto, esta pieza, que simboliza "el futuro optimista de igualdad que yo espero".

Y llegó el momento de la entrega, con Victoria Ortega y el decano, Luis Carlos Albo Aguirre, en pie, para otorgar el reconocimiento a una Patricia Viseur Sellers muy agradecida, antes de iniciar un discurso en el que alabó la figura de Alicia Salcedo y del Colegio, el de Oviedo, que aceptó su ingreso: "Fue una mujer con determinación, con las cosas claras", pero "la decisión del Colegio de Abogados también tuvo que hacerse con valor, con compromiso". Dijo "yo también tengo un compromiso con el Derecho, utilizo la ley para reconstruir el Derecho". Recordó que cuando era niña, afroamericana en Estados Unidos, veía las injusticias que se cometían en la sociedad en la que vívía, así que sus héroes entonces "eran juristas y, en vez de jugar con muñecas, leía sentencias". "Esa era mi motivación".

Durante su discurso, la galardonada también reconoció los pasos dados en materia de inclusión de la mujer en las esferas jurídicas y en las instituciones en general, poniendo como ejemplo, de nuevo, a Alicia Salcedo: "su entrada en el Colegio de Abogados de Oviedo fue importante para ella, pero lo fue más para el propio Colegio que se empoderó como institución". Aún así, reivindicó la falta de trabajo que aún queda por hacer en esta materia, con grupos de investigación, por ejemplo, formados por mujeres y hombres, que destapen la violencia sexual que aún hoy se ejerce contra mujeres y también contra hombres. De ahí la necesidad que se conformen equipos equilibrados, donde las víctimas sientan la cercanía de los mismos.

El decano, Luis Carlos Albo Aguirre, intervino después para acordarse también, en un primer momento, del pueblo ucraniano, al que se dirigió declamando un poema de Blas de Otero "Pido la paz y la palabra", porque "no encuentro palabras mejores que las de mi paisano".

El decano agradeció la presencia de la galardonada y la labor de la Comisión de Igualdad del Colegio por creer en la dimensión que un día podría tomar este Premio, como así lo ha demostrado, y como reconoció tras él la propia Victoria Ortega, afirmando que el Colegio de Oviedo ha sido "copiado" por el propio Consejo y por más Colegios de España para crear un reconocimiento similar al Alicia Salcedo.

Victoria Ortega cerró el acto agradeciendo de nuevo la presencia y labor de Patricia Viseur Sellers, V Premio a la Igualdad "Alicia Salcedo".